Durante años, cuando me caía del cielo una mota de nieve que se parecía a un cuento, la soplaba con todo el trópico de mis pulmones para que se esfumara y no me distrajera de mi novela. Hace unos meses me sentí solicitado por estos episodios tan diminutos en los que por ahí descubría gotas de mi sangre esparcida durante el día y acumulada como un pequeño soplo. Otras veces eran pequeños tesoros de imaginación y fantasía, liberadores que me habían sido donados no se por quién durante el sueño. Sentía que su construcción era débil, que se me daban como una oferta tímida para que hiciera de ellos algo con cierta solidez y cierta arquitectura estable. Los consideraba gracias menores de los dioses que pueden regirme, sin creer en la existencia de ningún dios. Y esa condición de ser obsequiado con sugestiones menores que en nada iban a contribuir a que yo construya una catedral, sino pequeñas capillas, vaya a saber de qué credo, me distrajeron profundamente de tales donaciones. Hasta que conmiserado de mi mismo por el tamaño de la empresa que había asumido cuando me di cuenta de lo poco que queda de vida por lo que ya tengo de edad, por lo que ya gasté de la cuota, paré durante un tiempo y me puse a escribir cuentos. Antonio Di Benedetto
Nombre indiscutible de la literatura argentina, Antonio Di Benedetto nació el 2 de noviembre de 1922, en Mendoza, Argentina. Estudio Derecho pero se dedicó al periodismo. El gobierno de Francia lo becó para realizar estudios superiores en esa especialidad. Como periodista fue subdirector del diario «Los Andes», y corresponsal del diario «La Prensa». En 1953 publicó su primer libro, Mundo animal, con el que inició su brillante carrera de escritor cuya cima fue la novela Zama. Los críticos han comparado sus trabajos al nivel de otros importantes escritores como Alain Robbe-Grillet, Julio Cortázar y Ernesto Sábato. Recibió la beca Guggenheim en 1974.
Durante la dictadura militar argentina del General Jorge Videla fue perseguido, apresado y torturado. Sufrió cuatro simulacros de fusilamiento. Fue excarcelado el 4 de septiembre de 1977 y se exilió en Estados Unidos, Francia y España. Regresó definitivamente a la Argentina en 1985. Murió víctima de un derrame cerebral el 10 de octubre de 1986 en Buenos Aires.
+34.913.766.827
C/ Caridad 21. Piso 5
28007 Madrid. España
info@adrianahidalgo.es
contacto:
info@adrianahidalgo.es
comunicación:
comunicacion.es@adrianahidalgo.com